El Inconciente

En el Mar de los Cielos
una Nube se escapa
Y en el susurro de los bosques
mil rostros se aplacan

No hay Don sin Razón
Ni Locura sin Cordura
No hay Estrellas en lo alto
Si no hay Hombres en lo bajo

Me tratan de atrapar
pero en el cielo
eso no lo pueden lograr.

La inquietud

En el andar de la noche
mis angustias se fueron.
Sumergiéndome en la nada
de aquello que me constituye
paso a ser un desnudo de mí.

No hay ya penas que me aflijan más
Ni miedos que me atormenten
Sólo estoy (yo y) el vacío
Sólo estoy en la nada, resistiéndome
Si no, no habría paréntesis,
no habrían palabras.

Me resisto a muchas cosas.
Me resisto a desaparecer.
Me resisto a ser el vacío.
Las construcciones, provisorias son
El vacío, eterno es.

El Sujeto sufre, no quiere aceptar
que el vacío lo precede.
El Yo sigue mostrando los síntomas
que lo constituyen, que lo crearon.
Los otros lo constituyeron, cuando el Sujeto
aún no había nacido. El Sujeto,
entonces, está en deuda desde que nació.

¿Where am i? ¿Dónde estoy? ¿Dónde soy?
Parece que resisto en todo el doloroso camino.
¿En qué camino? En el cual este sujeto ha sido
puesto, en el cual este Yo se mueve.

¿Quién soy yo? ¿Soy Yo? ¿Soy el sujeto?
¿Qué es esto que a mi alrededor veo?
¿Qué es este lugar en el que estoy?
¿Qué es este lugar en el que s oy?
Y seguiré andando estos lugares,
con penas y alegrías, con deudas y con créditos.

¿Mi Agua?

Hay que ver en qué mar me sumergí
para no ser aplastado por eso.
Mar de dudas, mar de confusiones
Mordeduras, maratones.

¿Dónde te has sumergido, Diego?
Estando mitad en el agua
y mitad en el aire,
hube sumergídome por completo.

¿Por qué, Diego, te sumergiste?
Porque si no lo hacía,
eso no me iba a dejar respirar.
Me hubiera ahogado.

¿Y no te ahogas, también,
estando tanto tiempo sumergido?
Sí, lo hago, sí, me ahogo.
¿Qué haces, sumergido, entonces?